El Compliance y la RSC están estrechamente conectados.
Mientras que el Compliance se centra en el cumplimiento legal y la prevención de riesgos legales, la RSC abarca un compromiso más amplio con la ética y la sostenibilidad.
Un enfoque integral implica que las empresas no solo cumplan con la normativa vigente, sino que también adopten un comportamiento responsable y transparente que supere esos mínimos legales.